viernes, 22 de diciembre de 2017

Chevrolet Corvette C2 Grand Sport (1963) - Exoto 1/18

Los ingenieros de GM seguían insistiendo en proyectos para carreras de endurance (Le Mans sobre todo), con el objetivo de vencer a los equipos tradicionales, pero como continuaba vigente la prohibición que comentáramos en las notas anteriores (Corvette Sting Ray y SS) GM no permitía este tipo de emprendimientos que la comprometieran y la expusieran a multas con el gobierno.
Por ese motivo, un grupo de ingenieros se pusieron a trabajar en forma clandestina dentro de las mismas instalaciones de GM, bajo la protección o vista gorda de sus superiores que estaban tanto o más entusiasmados que aquellos con la idea, aún a riesgo de ser descubiertos y quedarse sin empleo.
Es que el lema era ganar el domingo, para luego vender el lunes.

Es así que el ingeniero en jefe de Corvette Zora Arkus-Duntov obtuvo de parte de su jefe Semon Knudsen (Gerente General de GM) un presupuesto reservado así como un lugar secreto dentro de las instalaciones para desarrollar el prototipo. Duntov era especialista en mejoras de chasis y puesta a punto de Corvettes para competición, siempre eludiendo los límites que GM les venía poniendo en todo lo relacionado con participar en carreras. En este caso modificando un C2, la flamante generación presentada el año anterior.


Duntov quería ponerse a prueba con los (hasta ese momento) imparables Shelby Cobra, y eso hizo en la Nassau Speed Week de 1963. No solo batió a los Cobra, sino que también a las Ferrari, que volvieron humilladas a su casa. Pero la gloria duró poco, GM se enteró de esto y e instó a Duntov a retirarse, vendiendo a equipos privados los 5 ejemplares hasta ese momento producidos y (se supone) destruyendo un sexto en proceso para que no queden dudas de la orden impartida.

Años más tarde Carroll Shelby le confesó a un colaborador cercano que no hubiese podido competir contra este Corvette y ni de cerca llegar a la gloria que obtuvo con sus Cobra de haber continuado en competencia dicho auto, concebido de una forma muy diferente, chasis tubular recubierto muchísimo más rígido, así como mejor motor y mejores frenos.
Interesante confesión de un hombre que hizo su reputación gracias a los Cobra.

La miniatura es de Exoto en 1/18, de fines de los 90 en versión "works" es decir prototipo de pruebas sin decoración.
Como suele hacer esta marca, produjo infinidad de variantes, incluso de las miles de réplicas (escala 1/1) que posteriormente se hicieron de este auto copiados de los prototipos originales que pasaron a manos privadas. Incluso hay también una versión roadster.

















viernes, 15 de diciembre de 2017

Chevrolet Corvette SS (1957) - AUTOart 1/18

El Corvette SS de 1957  fue un 'concept car', creado con el objetivo de competir en las 24 horas de LeMans. Dos chasis fueron construidos, 'la mula' y el auto a competir.
Usando como referencia al Mercedes 300SL, tenía carrocería de magnesio recubriendo un chasis y estructura tubular de acero, y era impulsado por un V8 de 307 caballos de fuerza con inyección de combustible.
Sin embargo, su primera prueba no sería en el crisol de LeMans, sino en su contraparte americana más corta, las 12 horas de Sebring.


El Corvette SS compitió por primera vez en la carrera de 1957 de Sebring, donde problemas de suspensión y otros defectos mecánicos obligaron a su retiro después de sólo 23 vueltas. General Motors estaba entusiasmado con el potencial de los SS en base a resultados de velocidad en las vueltas de prueba.
Juan Manuel Fangio fue el ganador en aquella ocasión, pero ya desde antes de iniciar estaba bastante impresionado con el coche, y probó el SS en las sesiones de práctica.
El resultado fue sorprendente: Fangio completó una vuelta 3 segundos más rápido (en un coche que él nunca había conducido antes) que otros conductores en sus propios autos.


A pesar del entusiasmo de GM, el SS fue desechado meses más tarde, en virtud de la prohibición (que hablábamos en la entrada anterior del Sting Ray) reinante en ese momento para evitar que las fábricas de autos se involucrasen oficialmente en la producción de autos de carreras, así como también toda publicidad de autos haciendo referencia a las mismas.
No obstante ello, esto no detendría a GM de desarrollar el Corvette como un deportivo para aquellos que amaban la apariencia de un coche de carreras con la comodidad de un vehículo para todos los días, característica que hoy en día el Corvette sigue manteniendo.

La miniatura es de AUTOart en 1/18 de comienzos de la década anterior, y al igual que el  mencionado Sting Ray hace gala de excelentes acabados, pintura y profusión de aperturas, siendo hasta el momento el único fabricante que lo reprodujo a escala. (incluso a 1/43 también, en otra excelente réplica)











jueves, 30 de noviembre de 2017

Chevrolet Corvette Sting Ray Racer (1959) - AUTOart 1/18

El Sting Ray Racer de 1959 surge como proyecto privado de Bill Mitchell (Vice Presidente de G.M. y Jefe de Diseño de 1958 a 1976).


Durante una visita de 1957 al salón del automóvil de Turín, su buen ojo fue atraído por una forma baja, optimizada agresivamente sobre un coche de carreras miniatura. Era un Fiat, puesto a punto por el famoso preparador Abarth y estilizado por el carrocero Pininfarina. Tenía un perfil muy bajo y redondeado, forma conocida como "streamliner" con cuatro distintivos repuntes por encima de cada rueda que permitía al resto de la superficie del cuerpo ser muy bajo.


Arriba: 1952 Alfa Romeo Disco Volante, y algo que a Bill Mitchell le llamó mucho la atención, la línea de cintura alrededor de todo el coche que une las partes superior e inferior, que se convertiría en un elemento importante del estilo de los Sting Ray Racer 1959 y el Corvette C2.

Ese momento crucial - centrado en los repuntes por encima de las ruedas - conducen a la creación del Sting Ray Racer y a cambiar para siempre la historia del Corvette.

Como dijimos al principio fue originalmente concebido por Bill Mitchell, este proyecto no llevaba ninguna identificación GM, Chevrolet ni Corvette. Esto se debía a una normativa vigente a fines de los 50 en USA que prohibía la competición, así como toda publicidad en autos relativa a velocidad, performance y carreras, aduciendo cuidar la seguridad pública, pero lo que realmente perseguía era reducir la ascendente espiral de costos de la industria.

Años después, y ya superada esa prohibición, el prototipo fue adquirido por GM, fue pintado de plata y presentado en el salón del automóvil de Chicago 1961.
Se añadió también un parabrisas del pasajero. La insignia, la misma que utiliza en Corvettes de 1963, fue agregada en 1961.


La Miniatura

Pertenece a la primera época de AUTOart, principios de los 2000, caracterizada por un gran apego a las formas y los mínimos detalles, lleno de aperturas y piezas separadas e incluso perforadas como puede notarse en las ventilaciones de capot y parrilla, todo en metal y a un precio competitivo.

Virtudes a contramano de lo que es hoy la marca, modelos en "composite" (una forma elegante de nombrar a la resina), sin aperturas y a precios prohibitivos que desalientan no solo al recién iniciado en este hobbie sino que ahuyentan y también a los veteranos como nosotros que a la vuelta de los años ya no nos pueden engañar de semejante manera vendiendo gato por liebre.





 








viernes, 11 de agosto de 2017

Honda S800 (1966-70) - AUTOart 1/18

Siguiendo con la saga de roadsters japoneses luego del Datsun Fairlady 2000 , esta vez le toca el turno al legendario Honda S800, un pequeño convertible que fue la culminación de una serie iniciada en 1962 aplicando la experiencia adquirida en el campo de las motocicletas.
Es así que deciden incursionar en la producción de pequeños autos con mecánicas provenientes directamente de aquellas, incluso hasta en su transmisión por cadena, que abandonó recién con el modelo que nos ocupa esta semana, a diferencia de los antecesores S360, S500 y S600
Dichas siglas en todos los casos aluden a la cilindrada, el común denominador era motores muy pequeños, pero que giraban bien por encima de las 8000RPM y que en el caso del S800 con 4 carburadores Keihin lograba una potencia de 70CV, lo que unido a un casco muy liviano catapultaba a este mini bólido hasta los 160 Km/h.



Se produjo en dos tipos de carrocería, coupé y convertible, siendo esta última la más vendida y por ende la de mayor difusión.
El primer deportivo de Honda será recordado por su particular sonido gracias a las altas RPM de su impulsor, quienes lo oyeron lo comparan en versión estandard con una aspiradora, o bien con una turbina de jet cuando estamos ante uno preparado para competición.


La Miniatura

Otra delicatessen que nos trae AUTOart, logrando captar toda la esencia de este legendario Honda hasta en el mínimo detalle.
Como en otras oportunidades, y gracias a piezas separadas que vienen en el empaque nos brinda la posibilidad de lucirlo con su capota abierta o bien cerrada como en la última foto, por supuesto que sin su techo deja relucir el impecable interior, marca registrada que pese a la costumbre no deja de sorprendernos en cada nueva realización.