Y no están errados, pues el '67 es considerado por muchos el mejor diseño de Mustang, y de hecho en éste se basaron para su revival de 2005/06
Pues bien, este modelo fue lanzado por AUTOart allá por el 2004, en tres versiones, una en color rojo, otra en verde oscuro de la película Bullit, y el dorado que hoy estoy mostrando.
Cada uno de ellos además del color difieren en las ruedas, y esa combinación fue decisiva en que eligiera el dorado, pues el rojo trae unas de con tazas cromadas, mientras que el verde del famoso film de Steve McQueen viene con unas totalmente negras que, sumado a lo oscuro de su pintura y su parrilla en negro sin ornamentos le dan un aspecto a mi gusto muy sombrío, por eso lo descarté pese a su fama cinematográfica que pedía a gritos su presencia en mi colección.
Lo ideal hubiese sido "me llevo los dos", pero esta escala por el espacio (y el precio, obvio) es prohibitiva para ese tipo de caprichos, de todos modos hoy día y ya con la madurez de los años en el hobbie no me arrepiento de aquella difícil elección.
Una toma casi calcada de la que trae en su caja, aquellas de la serie Millenium, con lujoso empaque doble, hoy ya desaparecidas en pos del "ahorro de costos", que por supuesto no se refleja en el precio actual de los modelos, sino más bien todo lo contrario.
Su aspecto general a primera vista es muy prometedor.
El perfil típico conocido como "fastback" que sigue una línea casi recta desde el techo para juntarse con la zaga, que le otorga ese caracter más deportivo al conjunto.
El frontal fue rediseñado, pero sin perder su esencia original.
Se acentuó el tamaño de la parrilla, haciéndola más prominente y logrando que los faros queden como hundidos hacia atrás.
El caballito sigue en su misma posición, lo mismo su bagueta central que incorpora unos pequeños faros de profundidad en sus extremos.
El paragolpes mantiene sus formas siendo recto con dos soportes verticales, lo mismo que las luces de posición que fueron embutidas.
La trasera sigue el estilo original del Mustang 64, rediseñada con unos faros algo más grandes y curvados hacia adentro, al revés que antes.
El paragolpes mantiene su forma de U, la tapa del baúl adaptada a la caída del techo da lugar a un contorno bajo el cual ahora incorpora la leyenda Mustang, esta vez sí AA las puso con letras fotograbadas en relieve (muy lindas, pero cuidado!!), y la tapa del tanque de combustible es algo más grande y lleva en su centro las siglas GT.
Debajo, salidas cuádruples de escape acentúan ahora el carácter deportivo del auto.
Las llantas tienen un diseño muy de la época, y están pintadas de forma tal que parezcan realmente metálicas, algo que AA sabe hacer muy bien.
Los neumáticos, con delgada banda blanca tienen su marca grabada Firestone, es extraño pues rara vez AA le pone nombre a las gomas, estimo que tiene que ser por un problema de pago de royalties o algo parecido.
Detrás de esas ruedas otra especialidad de la casa, los frenos.
Discos de metal, con su cáliper en una posición un tanto extraña a 45°.
En la trasera en cambio, sus frenos son de tambor...imaginemos lo que sería frenar semejante y pesado bólido impulsado por sus holgados 300 caballos, con esos neumáticos y esos frenos...mamita!!!
Pensar que hoy dia cualquier autito de 70 CV trae discos a las cuatro ruedas, y díganme si eso no es marketing para sacar más $$$
La pequeña tapa de baúl apenas da lugar para extraer la rueda de auxilio, y el fondo luce la ya consabida alfombrilla cuadriculada que parece que era furor baulero en esos años.
Las puertas, con su ventanilla baja abren a un ángulo ideal para apreciar el otro plato fuerte que es el interior.
Como curiosidad, notar los cinturones que salen del "rollo" desde la consola central, y son obviamente solo de cintura.
Cuánto se ha evolucionado en aspecto seguridad desde entonces!
El paquete incluye una consola de techo.
Pese al realismo del conjunto, y a diferencia del ERTL, los asientos no son operativos en ningún aspecto, y mucho menos los parasoles.
Antes de ir al motor, otra perlita.
Esas branquias del capot, en realidad no son tomas de aire (pues están invertidas al sentido de marcha) sino que alojan sendos indicadores de viraje, que el conductor puede ver desde el interior, cosa bizarra y poco práctica si las hay..., pero volvemos al marketing y esos pequeños detalles o espejitos de colores como aquí los llamamos.
Hoy dia las automotrices viven prácticamente de todas estas huevadas intrascendentes.
Volviendo al hilo, AA hizo un brillante trabajo, pues ambas piezas son en metal fotograbado y copian fielmente a las originales que estuve viendo por fotos en internet.
Ahora sí, el capot.
Y con varilla de sostén! que en aquellos tiempos de AA no era cosa usual, sino rareza...
Hay que ser justo con lo bueno, y con lo malo.
En esto, el ERTL le sacó varios puntos de ventaja.
Y también desde abajo, donde está todo lo que debe estar y con sus colores adecuados.
Y parafraseando a un amigo cordobés, Magnificent Mustang GT !