viernes, 26 de diciembre de 2014

Tractor Massey Ferguson 135 (1964) - Universal Hobbies - 1/16

El MF 135 lanzado en 1964 fue uno de los más populares tractores de la época, y el más vendido de la exitosa serie 100 de esta marca, formada por el agrupamiento entre Massey Harris y la Ferguson Company en 1953, la cual previamente había lanzado el también famoso Ferguson TE20 y en 1958 el MF 35, este último el primero en salir de fabrica bajo la nueva razón social fusionada.

Su fiabilidad y potencia fueron basa para el prestigio del MF135, masivamente vendido en UK, Irlanda, Australia y Estados Unidos.
Montaba inicialmente un Perkins, 3 cilindros de 45HP, hubo posteriormente otras motorizaciones e infinidad de variantes que escapan a esta breve reseña.

Se produjo hasta el año 1975.














La miniatura

Este ejemplar, al igual que el Ford 7600 pertenece a la fantástica colección lanzada hace unos años por Universal Hobbies, en varias escalas siendo ésta la mayor, la que no obstante ocupar un buen lugar nos ofrece a cambio un grado de detalle de lo más avanzado, y justamente en éstas máquinas es donde más se aprecia, y agradece, dado la complejidad mecánica y constructiva que queda a la vista para deleite de quienes admiramos estas joyas mecánicas.




























martes, 16 de diciembre de 2014

Renault 18 Turbo (1988) - Otto Mobile 1/18

El Renault 18, sucesor del R12 fue presentado en 1978 y fabricado en su país de origen Francia hasta 1989, donde fue reemplazado por el R21.

Sin embargo, fue producido algunos años más en otras factorías de la marca, entre ellas en España, Colombia, México, Venezuela y en nuestro país entre 1980 y 1993 como tope de gama de la marca francesa en ese momento, luego de discontinuar al legendario Torino, heredado de la ex IKA-Renault.

El modelo que hoy nos ocupa no formó parte de la gama argentina de motorizaciones (1.4; 1.6; 2.0 y 2.2 todos aspirados, más una diesel), ya que se trata de una versión 1.6 turbo, aunque sí tuvimos aquí el restyling conocido como Fase 2 que luce la miniatura, el cual incorporaba paragolpes integrales en plástico, spoiler trasero envolvente y rediseño de tablero y asientos.

Las llantas, específicas de la versión turbo, no nos resultan familiares y por lo visto tampoco son de las más populares en Europa, pues me costó conseguir en la web una foto real de un ejemplar calzado con las mismas.



La Miniatura

Después de haber tenido mi primer Otto (vide Peugeot 505 GTi ) quedé tan maravillado con esta marca y sus hiperrealistas acabados, que apenas conocido este R18 no paré hasta tenerlo.

Una recorrida en imágenes vale más que mil palabras, así que pues comencemos:



Hiperrealismo en su máxima expresión, el molde es tan fino y perfecto que si no supiéramos que se trata de una miniatura en resina dieciocho veces más pequeña, creo que con una ambientación de fondo con algún paisaje como lo hacen otros colegas, pasaría tranquilamente por una foto del auto real.




Lo que llama más la atención es su naturalidad, esta toma de frente es elocuente, y cada sucesiva vista es igualmente sorprendente en ese sentido.


Sobresale la calidad de pintura, su aplicación, brillo y tersura.

Los cristales, muy finos y transparentes complementan y realzan al conjunto.



Los interiores, aún sin poder acceder a ellos directamente ya que las puertas no son operables, están sin dudas por encima de todo lo que he visto hasta ahora en esta escala, que no es poco.

Me refiero a realismo al ojo por sobre lo que a materiales se refiere, que seguramente los hay mejores.




Máxime aún por haber tenido un R18 en su época y conocerme de memoria cada rincón del mismo, los que hoy vuelvo a descubrir en esta maravilla a escala.




Un detalle que denota el esmero del fabricante, es el hecho de incluir en la caja (no tan pomposa como otras marcas de renombre) un juego de insignias de repuesto, para el infortunado caso de que las provistas se estropeen y haya que reemplazarlas, un gesto muy original y que merece ser imitado.







En conclusión, un modelo que no podía faltarme y que hubo que aprovechar rápidamente ya que las tiradas de Otto son muy cortas y terminan agotándose.

Al contrario de lo que puede suponerse, su precio de lanzamiento es muy accesible, casi la mitad de lo que vale un AUTOart hoy dia, claro no tiene aperturas dirán como justificativo sus detractores, pero en percepción a primera vista todo eso pasa a segundo plano y su atractivo sobresale por su elevada fidelidad, cantidad de detalles, en resumen calidad y realismo del conjunto como un todo.

Creo que hará buena pareja con el Renault Fuego que, felizmente ya conseguí también, y aunque todavía no está en mis manos seguramente colmará mis expectativas tal como lo ha hecho el que acabo de presentar.